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Corea del Norte, el país que odia la libertad y los cristianos

Una tiranía brutal

Corea del Norte, el país que odia la libertad y los cristianos

Edificación de entrada al campo 22 detectada por el activista Joshua Stanton. / freekorea.us.jpg
El país que ha entrado en guerra oficial con EE.UU. y Corea del Sur es un régimen totalitario, comparable en sus métodos al nazismo de Hitler.

30 DE MARZO DE 2013, SEÚL

En Corea del Norte el régimen dictatorial sigue siendo el número 1 mundial en persecución religiosa, y  es el único país del mundo en el que hay “persecución absoluta” a los cristianos, según el informe que hizo público este año Puertas Abiertas . Pero esta persecución no es sólo religiosa, sino que afecta a todos quienes no son adeptos al régimen, hasta extremos insospechados como han difundido recientemente activistas sociales.

“Responsabilidad colectiva”es el término que usan y denuncian los refugiados norcoreanos. Explica la política del régimen de Pyongyang de extender el delito de subversión a toda la familia del acusado e incluso a sus vecinos. El razonamiento es simple:el opositor ha contaminado ideológicamente a su entorno, cuyos miembros deben responder por no haber prevenido las grietas en el sistema de pensamiento único. Hasta tres generaciones de una misma familia -abuelos, padres e hijos-, cuando no los residentes de un bloque entero, son enviados juntos a prisión.

Por todo ello, en una decisión que no tiene precedentes, el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas (CDH) ha aprobado hace unos días una resolución histórica que establece  una Comisión de Investigación que examinará “las violaciones sistemáticas, generalizadas y graves de los derechos humanos” en Corea del Norte .

No ha sido fácil qye esto ocurra, a pesar de las evidencias. Varias agencias de Derechos Humanos y organizaciones cristianas, entre ellas la Christian Solidarity Worldwide, han llevado adelante una campaña durante dos años para convencer a la ONU de la necesidad de centrar la atención internacional en los crímenes perpetrados contra el pueblo de Corea del Norte por uno de los regímenes más brutales del mundo.

DENUNCIAS PARA OÍDOS SORDOS
Los exiliados norcoreanos llevan años describiendo la aplicación de la Responsabilidad colectiva,ejecuciones en grupo, abortos forzados de fetos que también se consideraban genéticamente contaminados, ensayos de armas químicas en presos o la existencia de campos de concentración con decenas de miles de presos políticos y religiosos. La reacción inicial al escucharlos suele ser la misma con la que se recibieron las primeras noticias sobre Auschwitz. “Debe haber un error. Exageran. Nadie sería capaz…”

No hay, sin embargo, contradicciones ni fisuras en los relatos. Sorprende en cambio la similitud y concreción de los detalles, a pesar de ser ofrecidos por personas que no se conocían entre ellas, procedían de partes diferentes de Corea del Norte y habían estado en diferentes prisiones. Entonces empiezas a pensar que es posible: que en pleno siglo XXI, el de la información y la tecnología, Pyongyang esté llevando a cabo una masiva limpieza ideológica y logrando, además, que pase desapercibida para el resto del mundo.

‘ZONAS DE CONTROL TOTAL’
Hace unas semanas se han hecho públicas fotografías por satélite que confirman y ofrecen nuevos detalles sobre los campamentos de concentración norcoreanos, conocidos como “Zonas de Control Total”La claridad de las imágenes ha permitido, junto a la información de funcionarios que trabajaron en ellos, identificar el lugar exacto donde se encuentran los centros, incluido uno situado en la norteña región de Hoeryong. Es el C-22, denunciado desde hace décadas y donde las organizaciones de Derechos Humanos calculan que podría haber encerradas hasta 50.000 personas.

Kwon Hyok trabajó como administrador en el C-22 antes de abandonar su puesto y cruzar la frontera, pidiendo asilo en Corea del Sur. Su voz es especialmente valiosa porque no viene del legítimo resentimiento de la víctima, sino del arrepentimiento del verdugo. Kwon asegura haber participado en pruebas que incluían el gaseado de presos para comprobar los efectos de las armas químicas del régimen. “No sentía nada”, ha confesado al describir la pasividad con la que vivió las ejecuciones. “Me habían convencido de que eran los enemigos del Estado y debía aplastarlos”.

La indiferencia con la que el mundo suele recibir declaraciones como las de Kwon, pruebas materiales como las últimas imágenes de Google Earth o los testimonios de los supervivientes demuestran la facilidad con la que se olvidan las lecciones del pasado, en el caso de que hubieran sido aprendidas. Toda esa evidencia indica que los norcoreanos están padeciendo purgas similares a las que vivió la Unión Soviética de Stalin o la China maoísta de la Revolución Cultural (1966-1976). Y todo, sin que ocupe apenas la atención en foros internacionales o medios de comunicación.

El silencio se explica en parte por el aislamiento del último Estado estalinista del mundo y las dificultades de acceso de la prensa. Pero hay otras razones: Corea del Norte mantiene intimidada a la comunidad internacional con sus armas nucleares, la creciente capacidad de sus misiles de largo alcance y un calculado comportamiento errático con el que envía el mensaje de que sus acciones son impredecibles. Es el matón del patio del colegio, al que todos rehúyen. La política de apaciguamiento de surcoreanos, japoneses, europeos y estadounidenses ha sido interpretada por Pyongyang como una señal de que nada de lo que haga tendrá consecuencias, empezando por el maltrato de su pueblo.

NACER Y MALVIVIR EN UN GULAG NORCOREANO
Los gulags norcoreanos fueron creados en los años 70 por el fundador de la patria y Presidente Eterno Kim Il-sung, ampliados por su hijo Kim Jong-il y mantenidos estos días por el tercero de la dinastía, Kim Jung-un. El joven Kim, de quien se cree que no ha cumplido los 30, en el poder desde hace un año, es la esperanza reformista de Occidente, a pesar de que mantiene invariable el sistema totalitario de sus antecesores.

El país sigue siendo una inmensa cárcel para sus 23 millones de habitantes. Altavoces repartidos en cada calle, plaza y edificio despiertan a la población con loas al líder. Todos los ciudadanos llevan un pin con la imagen de uno de los tres Kim. El gulag espera no solo a quienes critican al régimen, sino a los que no le muestran suficiente devoción. Corea del Norte es, de lejos, el lugar menos libre y políticamente más reprimido del mundo.
 Pero hasta los dirigentes norcoreanos saben que ni siquiera la propaganda o el aislamiento pueden garantizar la supervivencia de una dictadura. Todas, tarde o temprano, terminan cayendo. De ahí medidas como la Responsabilidad colectiva. La política del castigo general anula incluso a los disidentes que podrían mostrar mayor coraje, los que están dispuestos a pasar largas temporadas en la cárcel o a arriesgar la vida. Las consecuencias de sus actos serán pagadas por su pareja, sus hijos, sus padres e incluso amigos. Los brotes de rebeldía son así cortados de raíz, extendiendo un sistema de espionaje comunitario en el que todo el mundo espía a todo el mundo. Nadie se fía de nadie. Y la más mínima sospecha es denunciada, porque no hacerlo podría suponer el fin propio.

El resultado es que la mayor parte de las cerca de 200.000 personas que están encerradas en los campos norcoreanos, según fuentes de la disidencia, probablemente nunca se opusieron al régimen. Han sido condenas por si acaso. Algunos, como Shin Dong Hyuk, ni siquiera llegaron a entrar en el campamento. Nacieron en él como consecuencia de la política de Responsabilidad colectiva.

El padre de Shin fue condenado a cadena perpetua como responsable subsidiario de la huida del país de sus dos hermanos en 1965. Años de buen comportamiento le valieron un permiso especial para contraer matrimonio con una reclusa y Shin fue el resultado de esa relación. El joven pasó los 22 primeros años de su vida en el Campamento 14, situado en Kaechon, donde asistió a la ejecución de su madre y de uno de sus hermanos y vio como torturaban a su padre hasta dejarlo permanentemente lisiado.

Shin Dong Hyuk logró escapar a Corea del Sur en 2005. Las cicatrices de su paso por el Campamento 14 siguen siendo visibles: la amputación de un dedo por tirar accidentalmente una máquina de coser al suelo, quemaduras en la espalda por las torturas recibidas desde que tenía 13 años y las heridas que se produjo en las piernas al saltar la verja electrificada de la prisión durante su huida.

“Nunca me había planteado escapar porque no pensé que pudiera existir otra vida más allá. Un recluso empezó a contarme cómo era todo fuera y juntos decidimos intentarlo”, recuerda Shin, cuyo relato se recoge en su libro autobiográfico ‘Escapada al mundo exterior’. Para él, como para cientos de supervivientes de los campos de concentración norcoreanos, la pregunta es cuándo empezará el mundo a creer su historia.

Fuentes: ProtestanteDigital

Editado por: Protestante Digital 2013

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Manifestación ante la embajada de Irán por la libertad de Yusef Nadarjani

En Madrid

 

Manifestación ante la embajada de Irán por la libertad de Yusef Nadarjani

Ciudadanos comprometidos con la libertad religiosa se concentraron en la tarde de este pasado 3 de octubre ante la embajada de Irán en España.

04 DE OCTUBRE DE 2011, MADRID

Convocados por la plataforma católica HazteOir, se sumaron la Unión de Jóvenes Bautistas de Madrid y evangélicos a título particular; entre ellos Enrique Montenegro  (Presidente de COMIMA, Coordinadora de Ministros de Culto de Madrid) y el cantautor Marcos Vidal.  Junto con ellos decenas de ciudadanos exigieron la liberación del pastor evangélico Yusef Nadarjani (Youcef Nadarkhani), que podría ser ejecutado en cualquier momento en Irán por el simple hecho de mantenerse fiel a su fe cristiana.
Los gritos de libertad de los presentes se unieron a los cientos de miles de mensajes enviados a la embajada iraní en la última semana, en los que se clamaba por la vida de este ciudadano, cuyo único delito es haber nacido musulmán, pero profesar otra fe.
Tras leer el Manifiesto preparado para la ocasión en el que se ha hecho repaso de la vida de persecución que sufre tanto Nadarjani como su familia, unos representantes de la manifestación trataron de ser recibidos por las autoridades diplomáticas iraníes, pero éstas rechazaron el encuentro , por lo que optaron por dejar en el buzón de la embajada un cartel con el texto “Libertad para Youzef Nadarkhani” firmado por los presentes (cartel que viene recogido en la imagen que encabeza esta noticia).
Algunos ciudadanos también han llamado por teléfono a la Embajada Iraní en Madrid y las primeras llamadas recibieron respuestas confusas, con evasivas como un supuesto desconocimiento del caso, para posteriormente dirigir estas peticiones al “departamento político” o al “departamento de prensa” (teléfono : 91 345 01 16, fax: 91 345 11 90).
EN SERIO PELIGRO DE MUERTE
Desde el pasado lunes, la vida del pastor evangélico está gravemente amenazada . Su delito, según la ley islámica radical, haber nacido en una familia musulmana y ser ahora un pastor cristiano evangélico, a lo que se han añadido “delitos contra la seguridad nacional“ sin pruebas ni juicio reglado.
Sus padecimientos por causa de su fe son atroces y vienen de lejos. Desde hace dos años está detenido, y el apoyo y la movilización mundial en defensa del derecho a la vida de este hombre se ha incrementado en los últimos días para presionar a las autoridades iraníes para que desistan de su atroz intención, que atenta contra la libertad religiosa.
ESCRIBA UN EMAIL
Puede dirigirse al embajador de Irán en España (email : [email protected] ), con un texto similar a éste: “Señor Embajador: El señor Youcef Nadarkhani, ciudadano iraní de 34 años, ha sido condenado a muerte en la provincia de Gilan por profesar la fe cristiana. Su cautiverio y su condena violan el derecho humano fundamental a la libertad religiosa. Por favor, transmita al Gobierno de su República el rechazo de la sociedad española a la persecución religiosa y haga todo lo necesario para conseguir la liberación del señor Nadarkhani”.
HAZTE OIR
El compromiso de HazteOir.org con la libertad religiosa es una de sus señas de identidad desde sus comienzos en 2001. Ha concedido uno de sus premios anuales a Sahbaz Bhatti, ministro pakistaní de minorías de Pakistán asesinado recientemente por oponerse a la imposición de grupos extremistas de corte islamista. Recogerá este premio su hermano, Paul Bhatti, que estará en España a primeros de noviembre.

Fuentes: Hazteoir

© Protestante Digital 2011