Benedicto XVI tendrá en la JMJ un apretado programa que no le impedirá encuentros con Zapatero, Rajoy, y la familia real en varias ocasiones.
17 DE AGOSTO DE 2011, MADRID
El jueves por la mañana el principal líder de la Iglesia Católica visitará España por tercera vez. Tras estar en Valencia y Santiago de Compostela, acudirá a Madrid al mayor evento de masas organizado por la Conferencia Episcopal Española en los últimos años.
Pero aunque desde la organización se destaca la función “pastoral” de la visita, no faltarán en la apretadísima agenda de Benedicto XVI los encuentros con los principales gobernantes del país.
Así, el jueves por la mañana el Papa llegará al aeropuerto de Madrid – Barajas, en donde le esperarán con puntualidad los Reyes de España, el presidente y otros altos cargos del gobierno . Allí, en la ceremonia de bienvenida, está previsto que Ratzinger dirija sus primeras palabras en un discurso público.
La tarde estará centrada en la actividad de la Jornada Mundial de la Juventud, con una fiesta de bienvenida que sin duda será uno de los platos fuertes de la visita.
CONTACTOS POLÍTICOS
El día viernes, Benedicto XVI realizará una visita “de cortesía” a los Reyes de España en el Palacio de la Zarzuela . Don Juan Carlos y Doña Sofía ya habrán estado con el Papa el día anterior. Al día siguiente, los Príncipes de Asturias participarán en la vigilia con los jóvenes en el aeródromo de Cuatro Vientos y, por último, los Reyes asistirán a la misa de las 9:30 en el mismo lugar para después despedir al Papa otra vez en Barajas a las 18:30 horas.
En cuanto al presidente de Gobierno, se reunirá en audiencia privada con Ratzinger el viernes por la tarde en la Nunciatura Apostólica de Madrid . Será el último encuentro que mantenga con el agnóstico Zapatero como presidente de Gobierno. Según informó el portal Religión Digital, desde el Vaticano se intentó programar un encuentro con el próximo candidato socialista, Alfredo Pérez Rubalcaba, pero finalmente lo apretado de la agenda del Papa impidió esta coincidencia.
En cambio, el líder de la oposición Mariano Rajoy sí tendrá la oportunidad de ver al Papa . Será el sábado a las 13 horas. Se trata del tercer encuentro que mantienen en España, esta vez, en la Catedral de la Almudena.
AUDIENCIAS Y OLVIDOS
La Constitución Española de 1978 expresa en su artículo 14 que todos los españoles “son iguales ante la ley, sin que pueda prevalecer discriminación alguna por razón de nacimiento, raza, sexo, religión, opinión o cualquier otra condición o circunstancia personal o social”.
Además, en el artículo 16.3 se expresa con claridad que “ninguna confesión tendrá carácter estatal. Los poderes públicos tendrán en cuenta las creencias religiosas de la sociedad española y mantendrán las consiguientes relaciones de cooperación con la Iglesia Católica y las demás confesiones”.
No llama la atención, por tanto, que ante cualquier visita del Papa, las autoridades, los poderes públicos más reconocibles para todos, vuelquen todos sus esfuerzos en mantener relaciones de cooperación con la Iglesia Católica. Mientras, las denominadas en la Constitución “demás confesiones” tendrán que seguir esperando a que las apretadas agendas de sus principales gobernantes encuentren un hueco. Para el Papa, sin embargo, siempre tendrán tiempo.
En este sentido, recordar que hasta hoy ningún Presidente de Gobierno de la España democrática ha recibido aún de manera oifical a los protestantes españoles, ni la Casa Real ha estado presente en algún acto evangélico. Sí ha habido encuentros con el máximo responsable del PSOE cuando estuvo como partido en la oposición, pero no con el PP, incluyendo a Mariano Rajoy.
Autores: Daniel Hofkamp
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