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Cada vez se cierran más iglesias católicas y protestantes en Holanda

 

Cada vez se cierran más iglesias católicas y protestantes en Holanda

Actualmente hay 4.200 iglesias en Holanda, de las que unas 1.400 serán clausuradas antes de 2020. 900 iglesias fueron abandonadas desde 1970.

18 de mayo de 2011, HOLANDA

Según el profesor Peter Nissen, de la Universidad de Nimega, un tercio de esas 900 iglesias que dejaron de utilizarse, fue demolido. Otro tercio fue asimilado por otras religiones y el resto fue destinado por los nuevos propietarios a funciones como oficinas, restaurantes, bares y apartamentos.
Un ejemplo que ilustra bien la situación es el de la Vredekerk, en Bussum, cuya torre se divisa desde lejos. Construida en 1914, esta iglesia protestante se encuentra en el centro de la ciudad, no lejos de la estación central de trenes. Pero al llegar a la entrada se descubre que, a pesar de la torre, las grandes puertas de madera y su ubicación central, el edificio ya no funciona como iglesia. En lugar de los avisos de horarios de culto, encontramos el intercomunicador y los buzones de correo para los 18 apartamentos que ocupan actualmente el edificio.
La iglesia Vredekerk, que contaba con una escasa asistencia de fieles, fue vendida en 2005, renovada y convertida en un edificio residencial. El destino de la Vredekerk, por extraño que parezca, es algo común en Holanda.
MENOS FIELES
Este fenómeno, explica el profesor Nissen, refleja el estado actual de las iglesias católicas y protestantes en Holanda: la creciente disminución del número de fieles y la consecuente pérdida de ingresos. “Alrededor de 1960, el setenta por ciento de los católicos holandeses asistía a la misa del domingo. Actualmente sólo lo hace el 7 por ciento. Las iglesias, así como la sociedad holandesa y todos aquellos interesados en estos edificios por su valor como monumentos, se enfrentan al problema de que ya no se los necesita para servicios religiosos. ¿Es posible darles otra función? ¿Y quién cubriría los gastos? Ese es el mayor problema”, señala el profesor.
El mantenimiento de una iglesia puede ser un asunto costoso. Con espacios más amplios que otros edificios, las iglesias suelen estar emplazadas en sitios privilegiados y demandan altas inversiones en calefacción y electricidad. Por otra parte, no cualquiera está en condiciones de comprar una iglesia, especialmente las católicas. Según el departamento de arquitectura de la Diócesis de Haarlem, la venta de una iglesia puede ser un proceso de 5 a 10 años.
La diócesis católicas tiene algunas reglas para impedir que lo que para ellas el un espacio sagrado se transforme en algo que no corresponde con los valores cristianos. Aún así es posible encontrar iglesias convertidas en night-clubs, escuelas de buceo y alpinismo, e incluso sex-shops. Señala el profesor Nissen que aunque algunas fueron templos católicos la mayoría de estos edificios habían sido iglesias protestantes. “Para los católicos, la iglesia es la ‘casa del Señor’, mientras que para los protestantes es meramente un lugar físico de encuentro, sin ese carácter sagrado”, interpreta.
La única manera de evitar la demolición de una iglesia es convertirla en un monumento nacional. Ese es el caso de la Heilig Hartkerk (Iglesia del Sagrado Corazón) en Haarlem, construida en 1902 y reabierta en 1998 como pensión estudiantil y salón de belleza.
UNA PELUQUERIA ESPECIAL
Jan Dortmundt, propietario del salón que ocupa la antigua capilla católica, asegura ser el único peluquero que trabaja en el interior de una iglesia en Holanda. El salón muestra varias referencias religiosas. El logo recuerda al Sagrado Corazón y la decoración incluye varias imágenes de santos. Jan Dortmundt ha reservado un espacio para encender velas encima del cual cuelga una imagen invertida del papa Benedicto XVI. Un gesto de ironía, asegura Dortmundt, desde una base de respeto.
Cuando el estilista se mudó a la nueva dirección, perdió algunos clientes que no estaban de acuerdo con la idea de instalar un salón de belleza en una antigua capilla. Pero esta pérdida fue compensada con nuevos clientes interesados en el sitio. Los objetos de decoración, así como las velas, suelen ser un aporte de los clientes. “Se sienten relajados en este lugar, que les inspira paz, y realmente es relajado trabajar aquí. Creo que eso es lo que hace especial estar en una iglesia”, afirma el peluquero.
ACTITUD RESPETUOSA
También Francesca van Raab, que vive en el apartamento A1 de la antigua iglesia protestante Vredekerk, cree que el trasfondo religioso del edificio influye en sus actuales habitantes.
Desde el interior, su casa no se parece en nada a una iglesia. Las únicas señales de la antigua iglesia son el alto cielorraso y las puertas ovaladas. En el hall de entrada, una pesada campana de bronce sirve como objeto de decoración y también se conservó la piedra angular en una de las paredes.
Francesca asegura que la antigua función del edificio ejerce una influencia en su actitud hacia él. ‘No soy una persona religiosa en el sentido de creer en Dios, pero creo que algo debe haber. Cuando me mudé a este lugar, lo hice con una actitud de respeto hacia cualquier persona que haya practicado su fe en este recinto. Creo que es necesario sentir ese respeto para poder habitar en una iglesia’, opina.

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El Consejo Evangélico denuncia el cierre indiscriminado de templos del Aytº de Madrid

Comunicado de prensa del CEM

 

El Consejo Evangélico denuncia el cierre indiscriminado de templos del Aytº de Madrid

Califican como «grave» el cierre o amenaza de cierre indiscriminado de templos protestantes por parte del Aytº de Madrid y –en menor medida- otros municipios de la Comunidad.

5 de mayo de 2011, MADRID

El Consejo Evangélico de Madrid ha hecho público este pasado 4 de mayo un Comunicado de prensa en el que anuncia que este lunes 9 de mayo, por primera vez en la historia de Madrid y de España, se producirá una manifestación de evangélicos; en defensa de su libertad religiosa y de culto.
Como ya se había anunciado, será en la Plaza de Cibeles, a las 11.00 horas , y se espera una amplia representación de los protestantes madrileños, que denuncian como grave el cierre o amenaza de cierre indiscriminado de sus templos por parte del Ayto de Madrid y –en menor medida- de otros municipios de la Comunidad.
El Consejo Evangélico de Madrid (CEM) expresa que esta manifestación (cuya solicitud legal de permiso ha sido realizada por el Consejo Evangélico de Madrid) se ha realizado recogiendo la denuncia de una amplia plataforma de pastores e iglesias de Madrid, ante la que el CEM ha respondido apoyándola “como legítimo representante de las iglesias evangélicas de la Comunidad de Madrid ante las instituciones autonómicas y locales”.
El CEM denuncia la reiterada y grave discriminación con los templos protestantes por parte de varios municipios de la Comunidad de Madrid; y en especial del Ayuntamiento de Madrid, que en los últimos años y especialmente en los últimos meses ha precintado 5 lugares de culto (y abierto expediente contra más de 20 templos).
“Ésto ha supuesto dejar sin sus iglesias a miles de madrileños. Un cierre que afecta además negativamente a la importante labor social que se realiza (reparto de ropa y alimentos, comedores, ayudas escolares y a inmigrantes)”, expresa el CEM.
“El pueblo evangélico o protestante madrileño percibe una discriminación religiosa,lo que supone una coacción al ejercicio de la libertad y de sus derechos fundamentales” dice el Comunicado.
Además, el CEM expresa que es un enorme contraste “esta actitud discriminatoria e injusta del Ayuntamiento de Madrid con otras instituciones madrileñas como la Asamblea de Madrid, cuya presidenta Elvira Rodríguez recibió recientemente al Secretario general de la Alianza Evangélica Mundial (que representa a 50 millones de protestantes en el mundo)O también, recientemente, la Comunidad de Madrid, que acaba de firmar un convenio con el CEM regulando la asistencia religiosa de los capellanes protestantes en hospitales públicos”.
Anuncia el CEM que tras la manifestación se presentará en el registro del Ayuntamiento de Madrid un amplio dossier con la exposición de los hechos, las causas de los mismos (que a continuación se resumen), un documento detallado de los templos protestantes afectados en la actualidad, y una serie de solicitudes (que se incluyen resumidas y extractadas al final de esta noticia).
LAS CAUSAS
Todo este problema, razona el CEM, surge porque no se ha reglamentado la normativa para los espacios de culto, lo que está provocando que se aplique normativa propia de actividades mercantiles, tipo discotecas, pubs, espectáculos públicos u otros, dependiendo del criterio de cada distrito municipal que toque , “afectando así su aplicación estricta o caprichosa a los derechos fundamentales garantizados por la Constitución Española”. Además se suma la falta de reserva de suelo en los planteamientos municipales para los templos.
Aclara el Comunicado que los evangélicos madrileños “No pedimos un trato de favor al Ayuntamiento de Madrid y al resto de municipios, ya que defendemos cumplir las normas de seguridad y sanidad, pero sí que se evite un claro trato discriminatorio”.
Amparan sus demandas en el Articulo 16 de la Constitución Española que recoge la libertad de culto , en la Ley Orgánica 7/1980 ,de 5 de julio, de Libertad Religiosa y en el Acuerdo de Cooperación del Estado con la Federación de Entidades Religiosas Evangélicas de España.
SOLICITUDES
Por todo ello piden al Ayuntamiento de Madrid y al resto de municipios donde pudieran darse circunstancias similares los siguientes puntos.
1.- La paralización de los expedientes de precinto, clausura y cierre de los locales de culto evangélico, y el establecimiento de una moratoria hasta tanto no se consideren y desarrollen al menos los criterios básicos normativos que aseguren un trato justo y equitativo con los españoles evangélicos.
2.- El establecimiento de procedimientos adecuados de legalización de los locales de culto existentes y de implantación de otros nuevos , adecuados a las características de la actividad y proporcionales al tamaño de local y el aforo del mismo, que permitan el desarrollo de la actividad en diferentes supuestos.
3.- La exoneración de la obligación de solicitar licencia de actividad a los locales de culto evangélico, sustituyéndola por la necesidad de comunicación previa de inicio de actividad. adjuntando documentación técnica de seguridad y salubridad como único requisito.
4.- Que se materialicen nuevas cesiones de suelo para el uso dotacional religioso a las Iglesias Evangélicas. Que hacer ciudad incluya la inclusión y no la exclusión de los espacios para la realización de cultos evangélicos.
5.- La provisión de otras posibilidades de ubicación de locales de culto, como locales y edificios municipales ya existentes, centros culturales, etc.
6.- Mayor cantidad de suelo dotacional religioso clasificado en las posibles revisiones del Planeamiento urbanístico municipal.
7.- El establecimiento de directrices comunes de interpretación para la aplicación favorable de la normativa técnica y urbanística conforme a la singularidad de los locales de culto religioso.
8.- Contemplar la posible modificación de otras Normativas, en aras de favorecer el desarrollo de la libertad de culto dentro del Municipio.

  Para ello, requieren la formación, a la mayor brevedad, de una una comisión paritaria compuesta por miembros del Ayuntamiento de Madrid con la participación de las instituciones representativas del conjunto de la iglesia evangélica en Madrid  (Consejo Evangélico de Madrid), para el desarrollo de la normativa y la solución de todos y cada uno de los casos existentes en la actualidad
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Fuentes: NotiCEM

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¿Palabra del Señor o Palabra de la Iglesia?

Leonardo de Chirico

 

La Biblia en una reciente declaración papal

¿Palabra del Señor o Palabra de la Iglesia?

La Biblia ha sido siempre objeto de una continua polémica entre la Reforma Protestante y el Catolicismo Romano.

8 de mayo de 2011

De modo que, cualquier declaración procedente del Papa sobre este tema debe leerse cuidadosamente por parte de todos aquellos que viven la fe centrada en la Biblia. La declaración de la que estamos hablando procede de un determinado Sínodo, que tuvo lugar en 2008, cuando los obispos católico romanos trataron la siguiente cuestión: “La Palabra de Dios en la vida y en la misión de la Iglesia”. Después de los debates de cada sínodo, es costumbre que el Papa emita un documento escrito que resume lo más esencial de los procedimientos y los declara autoritativos. Este es también el caso de la Exhortación Apostólica Post-Sinodal Verbum Domini (VD, la Palabra del Señor)  promulgada en 2010 por Benedicto XVI.
El documento recuerda la enseñanza CR de la Biblia de la forma en que se ha articulado y enseñado en el siglo XX. En particular, reconoce la Constitución Dogmática del Vaticano II Dei Verbum  (La Palabra de Dios) como la primordial referencia doctrinal para la teología católico romana de la Palabra de Dios y la considera en total continuidad con el Concilio. Lo más interesante es la relación entre la Palabra y la Biblia que se manifiesta en VD.
Para empezar, VD pretende que la Palabra de Dios “precede y excede la Sagrada Escritura, aunque la Escritura, como inspirada por Dios, contiene la palabra divina” (17). VD pretende que la Biblia es la Palabra de Dios en el sentido de que contiene  la Palabra. Existe la Biblia y también existe una palabra adicional más allá de la Biblia, lo cual hace que la Biblia no sea suficiente por sí sola.  Lo que está en juego no es la inspiración divina de la Biblia (que VD afirma con seguridad), sino la suficiencia  de la Biblia y su finalidad . Para el Papa Ratzinger, la Biblia es la Palabra de Dios en cierto sentido, pero la Palabra de Dios es más grande que la Biblia. La última contiene la primera.
Aquí es oportuno hacer un comentario dirigido especialmente a los lectores protestantes.  La teología liberal ha desarrollado su propia teología de la Palabra, por lo cual la relación entre la Palabra y la Biblia se piensa de una forma dialéctica y existencial. En otras palabras, para algunas versiones de la teología liberal, la Biblia es un testimonio (falible) de la Palabra y se convierte en la Palabra de Dios, si alguna vez llega a serlo, cuando el Espíritu habla a través de ella. Ahora, la versión CR de la relación Palabra-Biblia se articula de una forma diferente. La premisa es la misma (o sea, la Biblia contiene  la Palabra) pero la fortaleza de la Palabra viene a través de la tradición de la Iglesia CR.
El desfase entre la Palabra y la Biblia no es existencial sino eclesial. La Iglesia es la cuna de la Palabra, tanto en su forma escrita del pasado (la Biblia) como en sus expresiones actuales (la Tradición). En este sentido, Benedicto XVI escribe: “La Iglesia vive en la certidumbre de que su Señor, que habló en el pasado, continua comunicando hoy su palabra por medio de su Tradición viva y su Sagrada Escritura. En realidad, la palabra de Dios que nos ha sido dada en la Sagrada Escritura como un testimonio inspirado de la revelación, a la vez que la Tradición viva de la Iglesia, constituye la norma suprema de la fe” (18). La Biblia se mantiene, pero debe ir siempre acompañada y además es superada por la tradición viva de la Iglesia, más amplia y más profunda, que es la forma de la Palabra actualmente. Entre otras cosas, esto significa que la Biblia no es suficiente por si sola para acceder a la Palabra y no es la norma final para la fe y la práctica. La Biblia debe completarse mediante el Catecismo de la Iglesia Católica que es “una significativa expresión de la Tradición viva de la Iglesia y una norma segura para la enseñanza de la fe” (74).
De este modo VD sustenta un punto de vista dinámico de la Palabra según el cual la Biblia es un estuche divino de la Palabra. Sin embargo, el punto de referencia definitivo de la Palabra es la Iglesia de la que la Biblia proviene y mediante la cual resuena actualmente la Palabra de Dios.
Muchas preguntas surgen a partir de la imagen descrita por VD que es totalmente coherente con el Vaticano II y, desde luego, con el Concilio de Trento.  Puesto que VD no es un tratado sistemático, sino una exhortación escrita, solamente se tratan algunos puntos para explicar la forma en que la Iglesia se relaciona con la Palabra.
Primero, el papel de las “revelaciones privadas”  ( p.e. las visiones marianas y las sucesivas revelaciones autorizadas por la Iglesia CR). Junto a la Biblia, “introducen nuevas prioridades, dan lugar a nuevas formas de piedad, o agudizan las antiguas” (14). Las revelaciones privadas son la base para los cultos marianos de Lourdes, Fátima y Medjugorie, por ejemplo. Para los evangélicos, estos cultos no encajan con la enseñanza bíblica fundamental, a pesar de que el método para las “revelaciones privadas” es la tradición de la Iglesia, no la Biblia sola. Para los CR cimentar la fe en la Biblia es importante, pero no concluyente. Existen pautas complementarias para el discernimiento espiritual que van más allá de la Escritura.
Segundo, la lectura “eclesial” de la Biblia.  Según VD, la Escritura no debe leerse nunca por cuenta propia. Su lectura debe ser siempre una “experiencia eclesial”, o sea, tiene que hacerse en comunión con la Iglesia. El tema que está en peligro no es únicamente el metodológico, o sea, hacer algo así como reemplazar la lectura privada por grupos de estudio a nivel parroquial presididos por un sacerdote, sino también el hermenéutico. “Una interpretación auténtica de la Biblia siempre tiene que estar en armonía con la fe de la Iglesia Católica” (30). Leer la Biblia es un ejercicio que se hace de conformidad con la iglesia institucional, tanto en sus formas como en sus resultados.
Aparentemente, hay mucha sabiduría en estas afirmaciones, considerando principalmente que existen riesgos reales de dejarse llevar por la fantasía, el individualismo, hacer interpretaciones torpes, etc., por parte de algunos lectores aislados de la Biblia. No obstante, aquí falta algo. Es muy desafortunada la actitud de una Iglesia que ha prohibido, durante siglos, la lectura de la Biblia en las lenguas vernáculas, y ahora no ofrece ni una simple palabra de arrepentimiento.
Por otro lado, resulta asimismo desconcertante que una Iglesia que ha evitado que la gente tuviera acceso a la Biblia hasta hace cincuenta años, no dedique ni una sola palabra a destacar la necesidad que tiene de autocorrección y vigilancia. Además, si la lectura de la Biblia debe hacerse siempre bajo la pauta de la institución, ¿qué ocurre si esta institución cae en el error, la herejía o la apostasía?  ¿Cómo corrige el Espíritu a una iglesia pecadora si no es mediante la Palabra bíblica? A lo largo de la historia de la Iglesia, la enseñanza de la Biblia tenía que hacerse, a veces, en contra dela iglesia institucional y en contra de su consenso. Unicamente una Iglesia que se autoproclama indefectible puede pedir total sumisión a “la vigilante mirada del sagrado magisterio” (45) sin encontrarse con un obstáculo final. Aquí está en juego la cuestión: ¿quién tiene la última palabra? ¿La Biblia o la Iglesia CR? Puesto que la Iglesia es “el hogar de la palabra” (52), VD responde: ¡la última!
Tercero, la práctica de la interpretación bíblica. Una lectura CR de la Biblia adecuadamente definida requiere la aceptación de la unidad del conjunto de la Escritura (“exégesis canónica”), así como también la obediencia a la Tradición viva de toda la Iglesia y la combinación entre el nivel de interpretación histórico-crítico y el teológico (34). La Iglesia CR recela de los dos extremos: Por una parte teme la arrogancia crítica que corta la unidad de la Biblia y rechaza sus orígenes divinos; por la otra, también desconfía del enfoque fundamentalista que ofrece interpretaciones “subjetivas”, “arbitrarias” y “antieclesiales (44). A este respecto se pueden hacer dos breves observaciones.
1.  Benedicto XVI es frecuentemente presentado a la opinión pública como un campeón de la “espiritual” lectura de la Biblia (p.e. su aclamado libro Jesús de Nazaret, 2007). Sin embargo, VD reconoce fácilmente los beneficios de los métodos histórico-críticos (32) al tiempo que rechaza sus demandas extremas cuando son contrarias a las consideraciones “teológicas”. Aunque no se considera un liberal, Ratzinger no pertenece a la misma tipología de erudición conservadora bíblica que puede encontrarse en los círculos evangélicos. Cualquier simple superposición enturbia las aguas.
2.  El fundamentalismo no se define de ninguna manera, pero es el destinatario de fuertes críticas. No se ofrecen referencias de la literatura fundamentalista pero en su lugar se hacen declaraciones negativas en lo que concierne a la teoría del dictado, o a la falta de reconocimiento del lenguaje bíblico como si estuviera ajustado a los tiempos y a las culturas. ¿Quién se cree que la Biblia fue dictada maquinalmente o que su lenguaje es de una realidad angelical? La impresión que se obtiene es que en este sentido VD juega contra un hombre de paja.
Cuarto y último, el contexto litúrgico de un enfoque adecuado de la Escritura. Leer la Biblia como una experiencia eclesial significa que debe hacerse en un contexto litúrgico establecido por la Iglesia CR. “El lugar privilegiado para la devota lectura de la Sagrada Escritura es la liturgia y, en especial la Eucaristía, en la cual, al celebrar el Cuerpo y la Sangre de Cristo en el sacramento, la propia palabra está presente y operando en medio de nosotros” (86). La audición de la Palabra de Dios es provechosa cuando se dan ciertas condiciones: la administración de la Eucaristía (54) y otros sacramentos (61), la Liturgia de las Horas (62), la práctica de obtener indulgencias (87), y la recitación del Santo Rosario (88). Según VD, la Biblia no puede nunca ir sola, sino que siempre debe estar rodeada de una parafernalia eclesiástica que informa, dirige y domina la lectura bíblica y su interpretación. Al hacerlo de esta forma, la Biblia nunca es libre  para guiar a la Iglesia sino que perpetuamente está condicionada por las prácticas extra-bíblicas de la Iglesia.
Es una buena noticia que la declaración papal aliente la lectura de la Biblia, pero el problema fundamental permanece: La palabra de la Verbum Domini  ¿es la de la Biblia o la de la Iglesia?

Autores: Leonardo de Chirico

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